Joanna Martyni es la coordinadora local de ASSIST Polonia desde hace catorce años, lo que la convierte en una de las coordinadoras nacionales más veteranas. Su viaje con ASSIST comenzó de una manera inesperada pero muy personal, provocada por la ambición de su hija Julia de estudiar en el extranjero y, en última instancia, una beca ASSIST. En la escuela secundaria, la determinación de Julia la llevó a buscar en foros de Internet becas disponibles para estudiar en EE.UU. Encontró el testimonio de un estudiante de Harvard que decía que ASSIST le había ayudado a destacar a la hora de solicitar plaza en esta prestigiosa universidad. En aquel momento, nuestra organización no tenía presencia en Polonia, pero eso no disuadió a Julia, que decidió ponerse en contacto con representantes de ASSIST en los países vecinos, y finalmente presentó su solicitud a través de ASSIST Lituania.
La perseverancia de Julia dio sus frutos cuando le ofrecieron la beca Davis, un prestigioso programa asociado a ASSIST. Sin embargo, con sus planes de futuro de estudiar medicina, se dio cuenta de que los costes de las facultades de medicina en Estados Unidos seguirían siendo difíciles de alcanzar, por lo que rechazó la beca. Pero el destino tenía otras ideas; Julia recibió en su lugar la beca ASSIST y la aceptó para estudiar en Lawrenceville, lo que le abrió las puertas a un viaje extraordinario no sólo para ella, sino también para toda su familia.
Para Joanna, la experiencia fue transformadora. Con poca información disponible en ese momento, ella y su marido se sentían inseguros y abrumados, preocupados por enviar a su hija a pasar un año en el extranjero. Una tranquilizadora videollamada con el ahora Presidente de ASSIST, Martin Milne, aportó claridad, lo que les permitió enviar a su hija a Estados Unidos. Pero el verdadero punto de inflexión llegó cuando Joanna visitó a Julia durante las vacaciones en su colegio estadounidense.
Joanna recuerda haberse sentido asombrada. "La grandeza de la escuela, sus modernas instalaciones y, sobre todo, su acogedora cultura no se parecían a nada que hubiera visto antes". Recuerda vívidamente momentos que la inspiraron: la honestidad y amabilidad de la comunidad, la seguridad de las pertenencias personales y la vibrante vida en los dormitorios, llena de risas y camaradería.
Uno de sus mejores recuerdos es el tiempo que pasó en la residencia de estudiantes, donde se quedó unas noches con una de las madres de la residencia y se empapó de un ambiente único. Recuerda que "era como estar en un campamento de verano", con animadas charlas resonando por los pasillos, cosméticos esparcidos por los baños y la energía sin límites de la juventud. Experimentar el ambiente académico, la sensación de hogar y la felicidad en los ojos de las chicas le había inspirado la necesidad de compartir esta experiencia.
Cuando Julia regresó a Polonia, prosperando en sus últimos años de instituto, Joanna se sintió aún más obligada a compartir este viaje transformador con los demás. Se dirigió a ASSIST con una petición sencilla pero sincera: llevar esta oportunidad a Polonia. Con una dedicación admirable, Joanna empezó a visitar colegios, a compartir la visión del programa y a animar a los adolescentes con talento a solicitarlo. Fue oficialmente la primera coordinadora polaca del programa ASSIST.
No todo fue coser y cantar desde el principio. Los primeros años fueron difíciles. Pocas escuelas polacas estaban interesadas, y la mayoría no entendía el poder del programa. Pero la persistencia de Joanna y su capacidad para conectar directamente con los estudiantes empezaron a dar sus frutos. Con el tiempo, las solicitudes pasaron de un puñado a docenas cada año. La sección polaca de ASSIST floreció bajo su liderazgo, año tras año, a medida que construía una red de estudiantes inspirados y escuelas solidarias que crecía cada año.
Creemos profundamente en nuestra misión
Para Joanna, ASSIST es más que una organización o un trabajo, es una vocación. Autodeclarada perfeccionista, todo en su vida se rige por los más altos estándares y se siente cómoda declarando que ASSIST es así, sabiendo por experiencia personal que ofrece experiencias que cambian la vida. Lo que alimenta su dedicación es la chispa que ve en los ojos de los jóvenes: su entusiasmo, su potencial y la certeza de que ella contribuye a forjar su futuro.
Ella dice: "Estoy segura de esto, ASSIST cambia vidas. Las críticas de los becarios cada año lo dicen todo: 'Este ha sido el mejor año de mi vida'. Ese es el poder de ASSIST".
A lo largo de 14 años, Joanna ha mantenido el contacto con los becarios cuyas vidas se han visto afectadas por el programa. Los ha visto sobresalir en sus exámenes finales, conseguir plazas en prestigiosas universidades de todo el mundo y emprender trayectorias vitales extraordinarias. Nadie que recibe una beca ASSIST vuelve a ser el mismo.
Palabras de sabiduría para las familias
El consejo de Joanna a los posibles candidatos y a sus padres es sencillo: "No se lo piensen demasiado".
Como madre de dos hijos que pasaron por ASSIST, cada uno en un entorno muy diferente, Joanna entiende las ansiedades y experiencias a las que se enfrentan los padres. Su tranquilidad proviene de su propia experiencia y de las innumerables historias de éxito de las que ha sido testigo; se siente cómoda apoyando a otros padres ya que ha caminado en sus zapatos. Sabe lo difícil que puede ser desprenderse de un hijo, pero subyace el pensamiento de que algo así nunca debe impedir que alguien presente su solicitud.
Joanna subraya: "El momento de decidir llega solo después de que su hijo reciba la noticia positiva. Confía en el proceso, porque la experiencia es real, cambia la vida y merece absolutamente la pena."
El testimonio de Joanna, construido sobre años de dedicación personal y profesional, es un testimonio del poder transformador de ASSIST. Su pasión y su duro trabajo han ayudado a más de cincuenta estudiantes y familias de Polonia a descubrir un futuro mejor.